Sus maneras en el campo y esa manera de regatear a sus rivales le marcó fuertemente al señor Sahelices, de ahí que este quisiera ser mediocentro, su ídolo le había inculcado la pasión por esta posición, tanta era su afición por el mediocentro danés que casi se pierde el inicio de la liga el año de Segunda división debido a un desprendimiento de rótula causado por tratar de emular la gravesinha, el regate estrella de su ídolo, durante un entrenamiento en verano, pero era más que evidente que Jaime no le llegaba ni a la altura de los talones al gran Gravesen, de ahí que el regate le saliese mal y su posterior lesión. A pesar de todo esto, su rendimiento en el campo era óptimo, y se ganó pronto un sitio fijo en el 11 titular de Chema Horcas. Iban pasando los partidos, y Sahelices, con poco ruido pero mucho éxito, conseguía ser uno de los cracks del equipo, en seguida se desató la locura por el mediocentro español, 'el nuevo Xavi', decían, aunque por alguna de sus declaraciones en rueda de prensa, el amigo Jaime llevaba camino de ser el nuevo Sergio Ramos, un par de pifias monumentales ante todos los micrófonos empezaron a dar lugar a los inumerables memes sobre el señor Sahelices, así que en seguida se ganó la fama de ser un pelin cortito a la hora de espresarse en las ruedas de prensa. En el año del ascenso a primera división fue jugador clave a la hora de repartir asistencias, tercer máximo asistente de 2ª división y un grandisimo fututo que le auguraba. Aquel verano ya fue cogiendo fama, pero, no nos engañemos, cogió más fama en memedeportes que en las canchas, se unía al club de Ramos con declaraciones jocosas e inexactas de lo que empezaba a ser un personaje público.
Logró cuajar una muy buena primera temporada en primera división, fue otro de los artífices del título de Liga en la primera temporada, pero entonces comenzó a desatarse otro escándalo con el jugador aquel mismo verano, fue pillado con hasta 18 'señoritas de vida alegre' en una fiesta privada que el mismo se había encargado de organizar en Tenerife. Cuando el titular salió a la luz, éste trataría de desmentirlo por todos los medios posibles, pero eso ya no era factible, el paparazzi de la prestigiosa revista '¡Adios!' le había pillado de lleno, copó, de nuevo, todas las portadas de prensa rosa, tanto fue así que recibió un toque por parte de su seleccionador Carles Puyol para que tratase de reprimir esos modales, pero esto no hizo otra cosa que fomentar aún más la ansia de Jaime por copar las portadas de los periódicos, tras un año algo más tranquilo en el club por su parte, llegaría el verano de los traspasos, en realidad Jaime Sahelices lo tenía casi hecho con el Manchester City, pero aquella misma noche en la ciudad inglesa se encontró con la mujer del señor Torrea, que iba a firmar también por el equipo presidido por el jeque, pero la noche se les fue de las manos, así que por simple remordimiento, Sahelices decidió no compartir vestuario con Torrea, por lo que pudiera pasar, el otro club de la capital, sabiendo que las negociaciones con el city 'se habían estropeado', aprovechó para hacerle una jugosa oferta,ya que estaba por allí, así que el señor Sahelices pasaría a formar parte de los 'red devils' por la nada despreciable cantidad de 19 millones de euros. Fue el gancho perfecto para que su amigo Jorge Jiménez fichase finalmente por el mismo club, viniéndo con la condición de estrella, durante sus vacaciones por inglaterra tendría lugar el día más feliz de su vida, conocería en persona al inigualable Thomas Gravesen, estaba ahí, compartiendo charla con su ídolo, una camiseta firmada por el medio danés fue el mejor premio para el centrocampista español. Una temporada llena de títulos y de buenos augurios esperaba en Manchester, máximo asistente de la Premier League y fue finalista en la gala del Balón de Oro 2021, aunque sólo pudo ser tercero. El centrocampista español era pretendido por media europa, pero tras otra gran temporada, el bajón generalizado de todo el equipo hizo que uno de los máximos señalados del fracaso del United. Así que en el verano de 2024 abandonaría la disciplina del club británico, pero no abandonaría
Pero todo explotó cuando Jaime recibió una durísima entrada por parte de Torrea, y este, doléndose desde el suelo le soltó su ya mítica frase:' Pringao, que mientras tú estabas tan tranquilo en tu casa jugando a la Play, yo me estaba cepillando a tu mujer un dia sí y otro también', esta frase fue escuchada por el árbitro, igual que vió el puñetazo del ojo que le propinó el señor Torrea y la tangana que se montó por la cual se perdieron 5 minutos de partido y en la que ambos dos acabaron expulsados. En el club verdiblanco finalizaría su carrera deportiva, donde en 2032, con 36 años y tras 3 buenas temporadas y una última algo mediocre en el Villamarín, el jugador maño decide colgar las botas en una emotiva rueda de prensa. Tras dejar el fútbol, siguió su actividad en la capital hispalense, fue nombrado Director Deportivo del conjunto verdiblanco, y tras sus grandes fichajes, le comenzaron a apodar 'el Monchi del Villamarín'. Tras estos grandes fichajes, se demostró que el señor Sahelices era más inteligentes de lo que todos creían, estuvo más de 25 años como Director Deportivo verdiblanco (desde los 40 hasta los 65), edad a la que decidió retirarse del plano deportivo y fue nombrado personaje honorífico del club verdiblanco, seguía con sus fiestas y con sus particulares romances por la capital hispalense, un tipo inmaduro hasta con 55 años, qué le vamos a hacer, cada uno es como es, pero la gran reputación que se le creó en el conjunto bético hizo que este personaje comenzase a caer algo mejor entre la gente. De ahí ya no se movería, pasaría los últimos años de su intensa vida viviendo a todo trapo por la capital andaluza, y haciendose 'Flavios Briatore' cada dos por tres (Hacerse un Flavio Briatore es el fenómeno conocido como el del señor mayor con pasta que gracias a su cartera cada mes se le ve con una novia distinta, y todas ellas sin llegar a los 35 años), todo un vividor amigos míos, así es la historia de Jaime Sahelices, un buen tipo al que más de una vez le pudieron los modales.