Qué fue de... Jorge Casas

Hoy, como no podía ser de otro modo nos toca hablar sobre un tio, peculiar, por qué no llamarlo así. Pero antes de empezar a meternos en barrizales donde el resultado puede ser bastante nefasto, comencemos por el principio. Corría un caluroso 22 de Julio de 1997 cuando dijeron que el mundo se pararía por un instante, ese en el que nació aquel bebé, su nombre, ya os lo suponéis, Jorge Casas.
Jorge era un tío feliz y alegre que se dedicaba desde bien pequeñito a tirarle la caña a todo aquel ser viviente que fuese mujer (e incluso a algún que otro maromo de vez en cuando) . Hay una anécdota que vale la pena contar del señor casas, verán ustedes, cuando este era un niño visitando una famosa fábrica de bebidas refrescantes con su familia, éste se puso a corretear por allí, con tal mala suerte que cayó a un bidón lleno de Red Bull, lograron sacar al pequeño con vida de aquel bidón, pero semejante cantidad ingerida en tan poco rato de dicha bebida le dejaría unas secuelas increíbles, la principal era que desde aquel momento (con 6 años) se pegó con el miembro viril en estado erecto durante 45 años. Ni durmiendo, ni comiendo, ni en clase, en ningún lado lograría bajar semejante alegría debajo de su bragueta, es más, cuenta la leyenda que este llevaría 3 de calzoncillos debajo de el pantalón para que no se le notase tanto ese estado de alegría y jolgorio constante (aunque de más mayorcito descubrió que esto le serviría para llevarse a las chatis de calle, pero ya retomaremos el tema más adelante). El pequeño Jorge Casas ya era un tiracañas de pro a la temprana edad de 6 años, el tema del Red Bull le hizo tener que crecer demasiado pronto, así que con esa edad ya empezaba a tirarle cañas a las adolescentes chonis quinceañeras, aunque todas se le quedaban mirando con la misma cara de asco que pone un vegano cuando pasa por enfrente de una carnicería, ya me entendéis.

En su época como estudiante, destacó por su alta capacidad lógica y su infinito poder de liderazgo, aquel chavalín tenía más liderazgo con 15 años que nuestros amigos Adolfo, Francisco y Benito en todas sus vidas, menos mal que el señor Casas tendrá un poco más de cabeza que estos. También cuentan las malas lenguas que nuestro amigo Jorge tuvo algún que otro romance con alguna que otra profesora de su instituto, seamos sinceros, la pobrecilla no supo resistirse a aquel bulto que se marcaba en los vaqueros del señor en cuestión, y contando que a Casas le gustaba jugar con su palito más que a Falete un Buffet libre, pues ya os podéis imaginar la conclusión.

Aunque si hubo un suceso que marcó la vida personal del dorsal 17 de 2ºH fue aquella fatídica experiencia vivida por Salou... Todo parecía ir normal, una noche de juerga con otros compañeros de equipo como lo eran Dani Saz, Rubén Torrea o Víctor Gracia, de los cuales ya nos encargamos de hablar en su momento, a lo que íbamos, una noche loca de jolgorio, aquella morenaza de espeluznantes curvas que volvieron loquito al señor Casas, la noche transcurrió como debía, y parecía que por fin el señor Casas iba a conseguir mojar el churrito, pero en el momento oportuno nuestro delantero se dio cuenta de aquel bulto sospechoso que tenía aquella morenaza en la zona de la entrepierna, él le preguntó que era eso, a lo que esta le contestó: "Verás mi amor, yo me llamo Manoli, pero he de confesarte que hasta hace dos años me llamaba Manolo y era camionero en Cuenca", que pena, cuando ya parecía que iba a cazar nuestro león, se encontró con aquella desagradable sorpresa, esta experiencia le marcará de manera trágica.
Llega el momento de centrarnos en su faceta profesional, ¿cómo llego este tipo al equipo de 2ºH?, pues ni pajolera idea, de hecho creemos que ni el lo sabe, la cosa es que formaba parte de aquel plantel, el problema es que con Raúl López ocupando el puesto de Delantero Centro titular, el señor Casas iba a chupar más banquillo de Drenthe, Faubert, Douglas, Vermaelen, Sandro y Munir juntos, ya os hacéis una idea. Este hecho fue el que empeoró su relación con el míster, ya que no soportaba ser suplentón, a pesar de que aprovechaba los pocos minutos que le daba el míster para reivindicarse con grandes actuaciones. Así se llegaría al fatídico día, 26 de Mayo de 2022, y Casas se reúne con el míster para informarle de su intención de salida del club a 2 días de jugar aquella final de Champions, tras una fuerte discusión entre jugador y entrenador, el delantero maño decide tomarse la venganza en caliente, todo fue muy simple, una ventana de su habitación daba a un oscuro callejón y el revólver ya estaba listo, justo por ahí pasaba el blanco esperado, el míster Chema Horcas, al que el señor Casas sin cortarse, le propinó 2 balazos mortales, tras esto, tocaba la parte más difícil de la operación, que nadie sospechase de él.

Tras un frenético fin de temporada y un largo verano donde todos los medios hacían hincapié en buscar al asesino del míster, el delantero terminará por derrumbarse el día 17 de Agosto, justo aquel día que había sido presentado con el Sevilla FC, éste dejó una carta de suicidio donde confesaba que había asesinado a Chema Horcas. Iba ya a lanzarse al Guadalquivir cuando justo dos aficionados sevillistas le lograron agarrar para que no se suicidase, aunque tras conocerse esa carta, el internacional español será condenado a una pena de prisión de 23 años y 70 días.

Allí vivirá grandes experiencias con peligrosas personas, y contemos el tema Red Bull, pues eso, que las duchas compartidas para él eran todo un suplicio, todo dios veía como aquello estaba más duro que una viga de metal, y los subsaharianos allí presentes decidieron pasar a la acción, al final nuestro colega Jorge se acabó acostumbrando, y lo que es peor, hasta le llegó a gustar el jolgorio que llevaban en aquellas duchas comunes, por no hablaros de las fiestas que montaban ahí, tanto fue así que lo acabaron declarando mister fiestas orgullo durante sus últimos años en chirona. Y encima con aquello siempre despierto, tenía para todos y cada uno de sus 'amiguitos' en la prisión, como diría el profesor que viene con un saco gigante de caramelos a su clase: '' No os preocupéis, que aquí hay para todos ''
 Muchos años después cumpliría su condena, y a su longeva edad de 48 años logrará salir de aquel oscuro y tenebroso mundo en el que se había pegado casi media vida, aunque este no logrará levantar cabeza tras la sorprendente proposición de noviazgo de su 'íntimo amigo', Víctor Gracia. Tras todas las vivencias pasadas en la carcel, consiguió un puesto de colaborador en Sálvame Deluxe, aunque este puesto solo le durará dos semanas y media, lo que tardó en enzarzarse con Kiko Matamoros en una discusión donde los dos acabaron a palos, no había aprendido la lección nuestro amigo Casas. La vida para él no tenía ni un rumbo ni un objetivo claro, así que decidió gastarse toda su fortuna en drogas, alcohol, señoritas de vida alegre... Y así llegaría a sus 55 años, donde arruinado, sin casa, y con todo embargado decidió quitarse la vida ingiriendo aquella garrafa de 5 litros de lejía, le apetecía algo consistente después de ese regustillo dulce que te deja el Red Bull en la boca durante 40 años. Así pues se acabaría la vida de aquel Delantero suplente que nunca aceptó un no como respuesta, una vida con grandes altibajos que acabará de la peor manera posible.